martes, 24 de abril de 2018
EL SER HUMANO
Una búsqueda insaciable
nada le llena
todo le pasa
no hay equilibrio
sólo carrera tras carrera
¿Qué colma su todo?
Nada, una lucha constante
nada lo detiene
ni la cálida brisa matutina
ni el rumor del río
ni el suave beso de amor
de los amantes
Luchas por todo
pero por lo que debes luchar
lo ignoras
Tu desasosiego te lleva
a no ver lo más simple
sencillo y puro de la vida
Carencia total
decadencia nefasta del ser
Fuente de la imagen: https://steemitimages.com/DQmQt8KgyoeZF2jU3XRVxvCzkxHkkjCXn1ixrz8YrYDJK9k/image.png
martes, 17 de abril de 2018
CHAMPURRIA
En otras épocas pasadas que sirven de lección al presente, las personas improvisaban sus bebidas. Eran todos unos barman y prueba de ello la famosa Champurria , delicia del dios Baco, que alegró el espíritu de muchos mozos de su época.
La mezcla sencilla y fácil, con la bendición de la sabia Naturaleza que nos brinda el aguardiente de caña de azúcar y deliciosa miel que servían para subir o rebajar el gusto del catador: más fuerte o menos espirituosa.
En diciembre se usaba mucho ya que en dicho mes se castraba la colmena y había suficiente miel para jugar a ricos manjares.
Entre velada y velada se dejaba colar esta bebida que suena afrancesada pero es de la mejor estirpe venezolana: aguardiente y miel y música de la Billo’s Caracas Boys, nada más y nada menos.
Carmen Muñoz de González
Fuente de la imagen: https://steemitimages.com/DQmfCqZS372z8xufnZvRmT3KgqeiBEttoLNkTEaxGP39fSU/image.png
miércoles, 4 de abril de 2018
RAMONCITO TRUJILLO (EL HOMBRE PIANITO)
Fuente de la imagen: https://steemitimages.com/DQmT68xd8jCWhKdBa2CBBoMwQnaPvWHd2MzWtrrPV55WAzm/image.png
En el tiempo en que en mi pueblo natal (Villa de Cura, estado Aragua, Venezuela) había fiestas populares, de lunes a domingo, Ramoncito recorría las calles con un pianito de cuerda con su respectivo monito que hacía las veces de recolector del dinero con su pocillito de peltre esconchadito y además sonaba la canción La Maricutana que estaba de moda en voz del inolvidable Beny Moré.
En los días que no usaba el pianito lo seguía su fiel amigo ¡Un chivo que tomaba aguardiente con él!
En las fiestas navideñas en el altozano de la Iglesia Matriz colocaba una bomba artesanal hecha de papel de seda y un perolito abajo con carbón que producía el aire caliente para elevar la bomba en el cielo villacurano. En Nochebuena de Navidad y en Año Nuevo esto era el gran entretenimiento de los villacuranos. Hoy en dia se le conoce como "El Globo de los Deseos" ¡Importado!
Ramoncito era un hombre bajito, creo que no llegaba al 1.50 m de altura y cuando se echaba el pianito al hombro era más alto que él.
Buscador de peleas jamás. Llegaba al bar Savery o al Bolívar a tomar su mistela y continuar amenizando las calles de mi pueblo con su música que apurruñaba el corazón.
La gente de entonces le preguntaba en la calle:
¿Cómo estás, Ramoncito, cómo está el monito y el chivo?
A lo que él muy respetuoso devolvía el saludo pero al final con algo muy impropio.
En el tiempo en que en mi pueblo natal (Villa de Cura, estado Aragua, Venezuela) había fiestas populares, de lunes a domingo, Ramoncito recorría las calles con un pianito de cuerda con su respectivo monito que hacía las veces de recolector del dinero con su pocillito de peltre esconchadito y además sonaba la canción La Maricutana que estaba de moda en voz del inolvidable Beny Moré.
En los días que no usaba el pianito lo seguía su fiel amigo ¡Un chivo que tomaba aguardiente con él!
En las fiestas navideñas en el altozano de la Iglesia Matriz colocaba una bomba artesanal hecha de papel de seda y un perolito abajo con carbón que producía el aire caliente para elevar la bomba en el cielo villacurano. En Nochebuena de Navidad y en Año Nuevo esto era el gran entretenimiento de los villacuranos. Hoy en dia se le conoce como "El Globo de los Deseos" ¡Importado!
Ramoncito era un hombre bajito, creo que no llegaba al 1.50 m de altura y cuando se echaba el pianito al hombro era más alto que él.
Buscador de peleas jamás. Llegaba al bar Savery o al Bolívar a tomar su mistela y continuar amenizando las calles de mi pueblo con su música que apurruñaba el corazón.
La gente de entonces le preguntaba en la calle:
¿Cómo estás, Ramoncito, cómo está el monito y el chivo?
A lo que él muy respetuoso devolvía el saludo pero al final con algo muy impropio.
Beny Moré interpretando "La Maricutana"
Suscribirse a:
Entradas (Atom)